El Camino Hacia Ser

"Aunque nada cambie, si yo cambio, todo cambia"
Honoré de Balzac

miércoles, 22 de julio de 2015

Gritos de Silencio


Señor, me dirijo a ti de la manera más respetuosa del mundo y desde la mayor humildad. Estas dos últimas semanas de casi incomunicación me están sirviendo para hacer un viaje a mi propio interior. Echo de menos tu presencia mi Amo. No es un reproche, por favor nada más lejos de mi intención. Tú siempre eliges, tuve la suerte de que me eligieras a mí, de que me tomaras como tu esclava, de que hicieras que mi existencia empezara a parecer coherente, y que muchas cosas que para mí nunca habían tenido sentido, empezaran a tenerlo. Pero también he tenido la "desgracia" de que me dejaras. Es algo que he hecho yo. Te he hartado. No he sabido estar a la altura. Aunque mi Amo, en ningún momento he pretendido no hacer las cosas como tú querías. Pero fuera como fuese, ahora estás lejos, muy lejos, muy distante. Sé que estoy "a prueba". Lo sé. Sé que es muy difícil que vuelvas a depositar tu confianza en mi. La única tranquilidad que me queda es saber que estoy dando todo lo que tengo. Lo único es que a veces me aterrorizo, porque a lo mejor, toda yo no soy suficiente. Señor. Echo de menos aquellos días en los que te sentía tan cerca, en los que me parecía que tu fuerza me hacía especial. Aquellos días en los que me preguntabas treinta veces por mis sensaciones, por cómo me sentía. Qué afortunada era, me sentía feliz, y por supuesto mi única preocupación era ser capaz de hacer todo lo que me decías. Ahora me siento nada.

Pero todo eso se quebró. Y ahora me siento tan vacía, tan sola, que parece que hasta puedo oír retumbar mis pensamientos dentro de mi cabeza. Estoy muy triste, mucho más triste de lo que creía que se pudiera sentir nadie, y te lo dice alguien que siempre ha sido triste y melancólica por naturaleza. Mi Señor, pienso que en el fondo lo que haces es prepararme para cuando decidas no volver. Otras veces, sólo pienso en que estás muy ocupado y tienes otras cosas que hacer. En otros momentos, tus palabras, con las que me dejaste clara mi posición, mi situación, me retumban en la cabeza, y sólo puedo pensar que si hubiera hecho las cosas mejor, seguirías a mi lado, como antes.

Perdóname Señor. No quiero molestarte, sólo quiero trasladarte mi pesar. Y también mi Amo, desde la mayor de las humildades, pedirte ayuda. Que sigas orientándome. No quiero fallarte. Estoy dispuesta a dejarme la piel, Señor. Lo estoy haciendo de hecho, mi Amo. Pero me equivoco. Me volqué en el trabajo, porque creía que así podría estar más cerca de ti. Incluso llegué a pensar que era lo que más te interesaba de mi. Creía que ya no te interesaba de otra manera. Y, lo único que yo quería era seguir estando a tu lado. Que siguieras considerándome tu propiedad, pero me pasó como a la paloma que se equivocaba y que por ir al Norte fue al Sur. Pensaba que me acercaba a ti, y lo que en realidad estaba consiguiendo era alejarte y hartarte de mi.

No sé en qué punto estoy ahora mismo, Señor. Sóloque mi tristeza, mi dolor, y mi soledad son algo tan enorme que creía que no se podía llegar a sentir tanto. Señor, por favor, no te enfades conmigo. No me malinterpretes, porque no hay ningún reproche hacia ti, Señor. Pero necesito explicarte estas sensaciones, compartir mis pensamientos. Y sobre todo Señor, te necesito a ti. Necesito tu presencia, tus órdenes, tus enseñanzas. A ti, mi Amo. Sé que no soy nada Señor. Pero también sé que lo único que hay de verdad en mi existencia, es que soy tuya, Señor, y siempre lo seré. Ya no puedo desandar lo andado y además no quiero hacerlo. Soy tu esclava, y aunque no vuelvas a verme así, nunca dejaré de serlo, mi Amo.

Para terminar una vez más sólo puedo, Señor, decirte gracias por todo lo que has hecho y estás haciendo por mi. Gracias por ayudarme a conocerme y por hacer que empiece a surgir una versión mejorada de mi misma, de tu Shatki, Señor. Así que Gracias.

Tu Shatki.

No hay comentarios:

Publicar un comentario